La Diabetes Mellitus es un trastorno metabólico que tiene causas diversas; se caracteriza por hiperglucemia crónica y trastornos del metabolismo de los carbohidratos, las grasas y las proteínas como consecuencia de anomalías de la secreción o del efecto de la insulina. Con el tiempo, la enfermedad puede causar daños, disfunción e insuficiencia de diversos órganos (OMS, 1999).
Se conocen dos tipos de Diabetes Mellitus:
La Diabetes de tipo 1 generalmente se presenta en la niñez o la adolescencia y los pacientes necesitan inyecciones de insulina durante toda la vida. Es insulino-dependiente.
La Diabetes de tipo 2 aparece por lo general en la vida adulta y está relacionada con el sobrepeso y la obesidad, el sedentarismo y una alimentación poco saludable, rica en azúcares y grasas. Es la forma más común de diabetes (alrededor del 90% de los casos en el mundo) y el tratamiento puede consistir en cambios de hábitos y estilos de vida. Bajar de peso, incrementar la actividad física y en ocasiones medicamentos por boca. En algunos casos incluso se requiere inyecciones de insulina subcutánea. Esos casos se los llama insulino-requirientes.
Todo el contenido y las recomendaciones que encontrará aquí son para la Diabetes Tipo II